Que mejor forma de saborear mi café, que cómodamente sentada, con un esclavo arrodillado ante mi. Tu misión es lamer mis botas altas de cuero, sacarlas brillo con tu lengua, y si no lo haces a mi gusto, recibir mis bofetadas, pero no muchas, porque se que eres un ser patético, y disfrutas recibiéndolas. Al igual que cualquier humillación, como escupirte en la cara. Humíllate siervo asqueroso, y disfruta sabiendo que sobre ti, esta tu Diosa, tomando su bebida caliente. Por tus gemidos de zorra, eres feliz, adorando mis botas y chupando las suelas de mi calzado. Eso me complace, y creo que te has ganado tu desayuno. Vas a comerte esta deliciosa magdalena, pero como soy generosa, la voy a enriquecer con unos buenos escupitajos, y tras ello, la voy a machacar y pisotear, y del suelo la vas a comer. No quiero que dejes nada! Cómetela imbécil!